[4] Se produjo loza fina estampada con los típicos motivos geométricos, vegetales, chinescos, escenas de género (abundando las vistas huertanas, como una barraca junto a una palmera), cacerías, etc. Natacha Seseña menciona que tras su cierre a finales de dicho siglo, dos de sus empleados, los hermanos Benzal, montaron un taller cerámico en Cartagena que funcionó hasta 1945.
[5] Se han conservado piezas destacables únicas como la caja de un reloj dedicada a Cristóbal Colón, un tinajón esmaltado en gredas y dedicado a la Sociedad Económica, y el conjunto denominado “salón árabe” realizado en 1886 para la hija de Tomás Valarino con un llamativo trabajo de azulejería policromada en reflejo dorado en un «salón rectangular con tres arcos de medio punto al frente y vanos formados por arcos de herradura» en los demás lienzos.
[4] Entre 1880 y 1883, se instaló en el mismo barrio de Borricén la fábrica “La Cartagenera Industrial Cerámica”,[7] creada quizá para reforzar la participación murciana en la Exposición Nacional de Minería, Artes Metalúrgicas, Cerámica, Cristalería y Aguas Minerales de 1883.
El más común presenta «dos manos unidas» que, a su vez se acompañan opcionalmente de la leyenda Rolandi Valarino y Cía.
También se registran marcas sin el motivo de las manos, unas con la inscripción Valarino/Cartagena y otras con Valarino, consideradas ambas de la segunda época, o sea manufactura posterior a 1870.