Al quedar huérfana, en 1808, fue adoptada por su tío paterno, Enrique de Comerford, conde de Bryas, que con la invasión francesa abandonó la guardia valona y se trasladó a Dublín.
En 1815 acompañó a su tío al Congreso de Viena, donde llamó la atención por su educación y belleza.
Establecida en Barcelona, entró en contacto con los realistas puros y financió la partida de Antonio Marañón, el Trapense, alzada contra los gobiernos liberales de Madrid, titulándose su generala.
Con la exclaustración decretada por Mendizábal quedó en libertad y fijó su residencia en la misma ciudad de Sevilla, llevando en adelante una vida discreta.
Novela original, histórica y contemporánea (Madrid, 1849), donde la presentaba como amancebada del Trapense, según Vicente de la Fuente por los negros celos del novio despechado, pues la hermosa Josefina había dado calabazas al prolífico escritor, quien antes de hacerla personaje novelesco la había pretendido como amante.