Iglesia del Oriente

La diáspora judía facilitó la evangelización de la Mesopotamia superior y se formaron Iglesias en los primeros años del cristianismo en ciudades como Edesa.

[4]​ En el siglo III ya había comunidades cristianas en el Imperio parto desde Mesopotamia hasta la región de Guilán.

[5]​ Litúrgicamente, la Iglesia se adhirió al rito siríaco oriental (Liturgia de Addai y Mari).

Durante el período moderno temprano, una serie de cismas dio lugar a dos o tres patriarcados rivales.

Su historia se inició a fines del siglo I en la satrapía de Asuristán en el Imperio parto.

[7]​ Sin embargo, tras la muerte del Rey Sapor II, se comenzó un período de tolerancia religiosa.

En el año 410, la Iglesia oficialmente se integró al Imperio sasánida mediante el Concilio de Seleucia-Ctesifonte.

[8]​ Por el siglo VII, la Iglesia del Oriente se propagó desde la frontera de los imperios Romano y Persa hasta China.

[10]​ Los musulmanes, aunque minoritarios por siglos, constituían la clase élite de la nueva sociedad, a quienes los cristianos no podían denunciar ni testificar.

[9]​ En consecuencia, los cristianos continuaban sus actividades misioneras entre los no musulmanes, especialmente en Asia Central, Egipto, la India, e Irán.

[11]​ Sin embargo, los regímenes Islámicos posteriores toleraron cada vez menos la existencia de cristianos, lo que resultó en persecución y, a veces, en una opresión brutal.

[15]​ Hoy en día, la Iglesia católica caldea cuenta con alrededor de 650 mil fieles y tiene su sede en Bagdad.

Ni siquiera logró la hegemonía total sobre la Ciudad de Antioquía, dónde había muchos monjes leales a Cirilo.

La cruz esculpida en la estela nestoriana del siglo VIII , se encuentra en medio de una densa nube, y sobre un pedestal de loto
Un relieve de cruz en el monasterio Rabban Hormizd , con el estilo típico de la cruz de la Iglesia del Oriente
La Iglesia del Oriente en su máxima extensión