Dirección General del Patrimonio del Estado

Precisamente, en 1851 se refunde con la Dirección General de Contribuciones Directas dando lugar a una nueva Dirección General de Contribuciones Directas, Estadística y Fincas del Estado.

[8]​ A penas un año y medio después, se suprime y las funciones relativas a la administración de las fincas del Estado se integran en la Dirección General de Rentas Estancadas, mientras que todo lo relativo a casas de moneda y minas pasa a la Dirección General de Loterías.

Este órgano se suprimió en 1871, integrándose sus bienes en esta dirección general.

[24]​ En 1963 se amplió el tamaño del órgano creando en su seno el Gabinete Financiero para elaborar los informes o propuestas de informe que le sean encomendados y una Sección de Coordinación para coordinar a los distintos órganos de la dirección general.

[25]​ Ese mismo año se vinculó a la DGPE la Comisión de Valores Ferroviarios, cuyo presidente era el director general.

[26]​ Los bienes del Estado en el exterior eran gestionados conjuntamente por la DGPE y la DGRI.

[30]​ Una reforma parcial en 1977, la primera en democracia, creó la Subdirección General de Empresas y Participaciones Estatales.

[38]​ En diciembre de 2020, la DGPE tomó posesión del Pazo de Meirás tras la sentencia judicial que obligó a la familia Franco a devolvérselo al Estado.

Entre las empresas que forman este grupo, están Loterías y Apuestas del Estado, Paradores de Turismo o Cesce.

No se incluyen personas que pudieran haber ostentado el cargo de forma interina.

Las desamortizaciones de Mendizábal en la década de 1830, junto con las de Madoz en la década de 1850, generaron la necesidad durante el siglo XIX de tener un órgano exclusivamente dedicado a gestionar los bienes y derechos del Estado.
El Pazo de Meirás es una de las propiedades más recientes en incorporarse al Patrimonio del Estado tras un largo proceso judicial.