Fuerte romano de Castleshaw

[1]​ La colina se encuentra a las afueras de Castleshaw, una aldea situada en el Gran Mánchester, en Inglaterra, Reino Unido.Fue reemplazado por un fuerte más pequeño construido hacia el año 105, alrededor del cual se estableció un asentamiento civil o vicus.Se encuentra en un lugar remoto y expuesto en la calzada romana que iba de Deva Victrix (la actual Chester) a Eboracum (York).[5]​ Es posible que también hubiese un fortín o puesto de señales en Worlow, entre Slack y Castleshaw.[1]​ Para impedir que las estructuras defensivas pudieran caer en manos potencialmente hostiles o ser usadas contra Roma, el fuerte fue desmantelado.[8]​[10]​ El vicus podría haberse mantenido con la llegada regular de soldados para recaudar pagos y recoger órdenes.[12]​ Según Claudio Ptolomeo, había una ciudad llamada Rigodunum, que pertenecía a los brigantes, cerca del lugar donde se encuentra Castleshaw.[4]​ En 1897, un anticuario y poeta local, Ammon Wrigley, cavó varias zanjas en el yacimiento.Un grupo a cargo del profesor Barri Jones —experto en la Britania romana— fue elegido para coordinar el trabajo.[19]​ North West Water, empresa propietaria del lugar en aquel momento, aseguró que el área no sería usada con fines agrícolas.[20]​ Los estudios encontraron un asentamiento de forma triangular situado al sur del fuerte.[1]​[2]​ El fortín fue construido sobre la parte sur del fuerte, dificultando descubrir qué había debajo.[24]​ La muralla, o terraplén, situada entre las dos zanjas solo tenía 0,5 metros de altura en su punto más elevado.[9]​ Estaba construida con turba, con arcilla arenosa en la parte superior y con cimientos de escombros.
Vista desde el fuerte romano de Castleshaw.
Plano del fuerte romano de Castleshaw dibujado por el anticuario Francis Bruton.