Ferrocarril de Peñarroya a Puertollano y Fuente del Arco

En 1956 la explotación ferroviaria pasó a manos del Estado, situación que se mantuvo durante los siguientes años.

La línea férrea se mantuvo operativa hasta 1970, fecha en la que fue clausurada al tráfico por falta de rentabilidad económica.

Tras la clausura de la línea, el trazado fue desmantelado y las infraestructuras quedaron abandonadas en su mayor parte, siendo derribadas algunas estaciones.

[3]​ Debido al auge que estaba teniendo la minería en la zona no pasó mucho tiempo hasta que SMMP vio la necesidad de prolongar el trazado desde Peñarroya a Pozoblanco y desde esta localidad hasta Conquista,[5]​ punto cerca del cual existía una importante explotación minera.

[6]​ La SMMP acabaría solicitando una concesión para construir un tramo intermedio entre Conquista y Puertollano, que le fue otorgada en julio de 1918.

[8]​ Durante el período de la Primera Guerra Mundial y los años que siguieron el tráfico atravesó una importante expansión.

Bajo gestión estatal se incorporaron automotores diésel para el tráfico de pasajeros, si bien las infraestructuras no sufrieron una modernización integral.

El complejo ferroviario de Puertollano no se conserva, ya que fue desmantelado completamente.

Asimismo, el tramo comprendido entre Fuente del Arco y Azuaga (Badajoz) se ha rehabilitado también como vía verde.

El tramo de mayor dificultad orográfica fue el comprendido entre Conquista y Puertollano, con pendientes que en algunos casos alcanzaban las 30 milésimas.

Para salvar los accidentes geográficos se levantaron numerosos puentes, viaductos y túneles, especialmente en el complicado tramo Conquista-Puertollano.

[7]​ El movimiento del enorme tráfico de mercancías llevó a que posteriormente se ampliaran los tramos hacia Puertollano y otros puntos.

La estación de Peñarroya , donde enlazaban los trazados de la SMMP.