Entre 1578 y 1581 sustituye a su hermano Pirro II Gonzaga como capitán de caballería en Flandes en apoyo de la Monarquía Hispánica, donde resultó gravemente herido en 1582 durante el largo asedio a la ciudad de Gante, que acabaría dos años después con la victoria española.
Desde allí, Ferrante Gonzaga y su regimiento se trasladan a Amberes, terminando así la malograda primera invasión española de Inglaterra.
Luchó en las tropas del Emperador, que también era rey de Hungría, contra los otomanos y sus vasallos protestantes (luteranos, calvinistas y unitaristas) durante la llamada “larga guerra turca”, o Guerra de los Trece Años (1593-1606).
Regresó a su villa natal en 1602, donde falleció tres años más tarde.
Probablemente hijo natural pero legitimado); Annibale (1602-1668), príncipe de Bozzolo y San Martino, mariscal imperial que llegó a ser Gobernador de Viena, y que el rey Felipe IV le concedió el Toisón de Oro (1657).