La escuela palatina era parte del plan de hacer renacer la cultura para fortalecer su Imperio.
Es precisamente Eginardo la principal fuente sobre la Escuela palatina, a través de su Vita Karoli Magni.
Algunas fuentes lo presentan como un completo iletrado, y otras señalan que sus dificultades se restringían a escribir latín.
[10] Alcuino definió varios ordines dentro del personal a su cargo: sacerdotes Christi, medici, versifici, scriptores.
[11] La Escuela palatina educaba a los hijos del emperador y a los nutritii ('alimentados'), los hijos de la aristocracia que se criaban en Palacio (convivae, aulici —'áulicos', de Aula regis o Aula regia—, palatini —de donde viene el término «paladines»—).