En estos relatos románticos, los caballeros paladines representan a la cristiandad contra una invasión sarracena (musulmana) de Europa.
Los paladines siguieron siendo un tema popular a través de la literatura medieval francesa.
La literatura del renacimiento italiano (siglos XV y XVI) introdujo más elementos fantásticos a la leyenda, que se volvería posteriormente un tema popular en las óperas en la música barroca de los siglos XVI y XVII.
Durante el siglo XIX y comienzos del siglo XX el término empezó a usarse nuevamente fuera de la ficción para referirse a confidentes militares cercanos al servicio de líderes nacionales.
Todas las historias hablan de paladines con los nombres Roland (castellanizado Roldán) y Olivier u Oliver.
Los doce paladines de Carlomagno, tal como aparecen en el Cantar de Roldán son: Los italianos Ariosto y Tasso nombraron a otros paladines: El término "paladín", actualmente, se utiliza para referirse (principalmente en la ficción) a una persona que asume la tarea de defender o proteger algo.
Otros condes palatinos se dedicaban a tareas militares y administrativas.
En la literatura cortesana francesa del siglo XII, los paladines son los doce compañeros más cercanos a Carlomagno, comparables al papel de los Caballeros de la Mesa Redonda en el romance artúrico.
Entre los paladines siempre se nombran Roldán y Oliveros; otros personajes recurrentes son el arzobispo Turpín, Ogier el Danés, Huon de Burdeos, Fierabrás, Renaud de Montauban y Ganelón.
El Cantar de Roldán enumera a los doce paladines como Roldán, sobrino de Carlomagno y principal héroe entre los paladines; Oliveros, amigo de Roldán y su más firme aliado; y Gérin, Gérier (estos dos son asesinados en la misma laisse a manos del mismo sarraceno, Grandonie), Bérengier, Otton, Samson, Engelier, Ivon, Ivoire, Anséis, Girard.
Los paladines figuran en muchos cantares de gesta y otros relatos asociados a Carlomagno.
En Fate/Apocrypha aparece Astolfo como el Servant Rider of Black En Final Fantasy XIV Paladín es una clase jugable.