Ernesto Zedillo

[6]​ Su administración también estuvo marcada, entre otras cosas, por nuevos enfrentamientos con el EZLN y el Ejército Popular Revolucionario,[7]​ la polémica implementación del Fobaproa para rescatar al sistema bancario nacional,[8]​ una reforma política que permitió a los residentes del Distrito Federal (ahora Ciudad de México) elegir a su propio alcalde y las masacres de Aguas Blancas y Acteal perpetradas por las fuerzas estatales.

Durante su niñez, los hijos del matrimonio Zedillo Ponce de León tuvieron que trabajar boleando zapatos[12]​ para ayudar a su familia.

Tres años más tarde ingresó en el Partido Revolucionario Institucional (PRI), la principal formación política de su país, de la que provenían todos los presidentes mexicanos desde su fundación.

Posteriormente estudió en la Universidad de Yale (New Haven, Estados Unidos), gracias a una beca concedida por el gobierno mexicano y con los ahorros de su empleo como auditor auxiliar en Banjército, doctorándose en 1981 en Ciencias Económicas.

En 1992 fue nombrado secretario de Educación Pública, cargo al que renunció en 1993 para asumir la dirección de la campaña del candidato oficial a la presidencia, Luis Donaldo Colosio.

En el terreno político inició y dio los primeros pasos a la democracia ejemplificando.

Por otra parte, la oposición logró ganar por primera vez las gubernaturas de varios estados y convertirse en mayoría en el Congreso.

Asimismo favoreció unas elecciones competidas en el año 2000, que permitieron por primera vez en 70 años la llegada a la presidencia de un candidato no emanado del Partido Revolucionario Institucional.

Aunque no tan problemáticos como en 1995, sus índices de aprobación se mantuvieron volátiles durante 1996.

Sin duda ayudado por la relativa recuperación económica y el pacífico traspaso de la presidencia al panista Vicente Fox (quien ganó las elecciones presidenciales de 2000, siendo el primer candidato opositor en 71 años que derrotara al PRI), Zedillo dejó la presidencia con una aprobación del 64% y un 25.4% de desaprobación.

Un hecho interesante se registró en la antes mencionada encuesta del 3 de enero de 1995: al mismo tiempo que Zedillo registró su aprobación más baja y una desaprobación del 30%, 46.1% de los encuestados respondieron no tener una opinión sobre su presidencia o bien no contestaron, siendo el único caso registrado en la historia mexicana moderna en que una pluralidad expresó no tener opinión alguna sobre un presidente en turno.

[23]​ El obispo Raúl Vera acusó al ejército mexicano de armar a los paramilitares que cometieron la masacre, basado en que se usaron armas de uso exclusivo del ejército.

[28]​ Por su parte, en septiembre de 2012 los Estados Unidos decidieron conceder inmunidad a Ernesto Zedillo,[29]​con lo cual se le blinda frente al posible resultado adverso de la demanda presentada ante la CIDH.

Índices de aprobación del presidente Ernesto Zedillo (1994-2000). Aprueba Desaprueba No sabe/no contesta
Ernesto Zedillo Ponce de León.
Ernesto Zedillo en el Foro Económico Mundial en 2008.