Emprendedor

Para Schumpeter, "los cambios y el desequilibrio dinámico traídos por la innovación del emprendimiento son la norma en una economía saludable".

Fue definido por primera vez por el economista Richard Cantillon como «la persona que paga un cierto precio para revender un producto a un precio incierto, por ende tomando decisiones acerca de la obtención y el uso de recursos, y admitiendo consecuentemente el riesgo en el emprendimiento»[7]​ Otros estudiosos han definido este término de distintas maneras, entre ellos: El término de la palabra emprendedor deriva de la voz castellana emprender, que proviene del latín, tomar, aplicándose originalmente —tanto en España como en otros países— a los que entonces eran considerados aventureros, principalmente militares, término que posteriormente pasó a tener connotaciones comerciales.

[9]​ Ese sentido y evolución está estrechamente relacionado con el vocablo francés entrepreneur, que surge a principios del siglo XVI.

Jean-Baptiste Say jugó un papel importante en esa generalización, haciendo en 1803 explícito y coherente ese nuevo sentido.

[15]​ No obstante, esto empieza a cambiar con Joseph Schumpeter, quien sugiere que invenciones e innovaciones son la clave del crecimiento económico,[16]​ y quienes implementan ese cambio de manera práctica son los emprendedores.

Hay quienes, con en ese espíritu, en la actualidad consideran al emprendedor como un héroe cultural.

Primero, una posición que puede ser trazada en torno a Adam Smith y los clásicos en general, para quienes la innovación es una cualidad humana que se manifiesta en la solución de los problemas: dado la existencia de éstos, alguien los percibirá y encontrará alguna solución.

Algunas de esas posibles soluciones fallarán o no serán adoptadas, otras adquirirán una gran difusión y éxito económico.

[28]​ (ver Ebeling en enlaces externos[cita requerida]) Otros perciben la innovación efectiva como dependiente de factores previos: “A nuestro juicio, la innovación es una actitud cultural que se sustenta en el conocimiento del mundo que provee la ciencia, y que posibilita por un lado generar y, por otro, sacarle partido, a las herramientas conceptuales y tecnológicas de las que disponemos, identificar problemas, encontrar las soluciones apropiadas y tener la capacidad de transferir estas soluciones a otros contextos u otros problemas.

Es decir, podemos crear o modificar distintas soluciones a fin de ponerlas en circulación, pero ellas se sustentan en un saber que ha llegado a su fase creativa como resultado del aprendizaje acumulado y de la maduración alcanzada por ese saber “.

En definitiva, el argumento es que si un país no desarrolla nuevas patentes, entonces se va a quedar atrás”.

[31]​ Sin embargo, y dada la necesidad de generar riqueza y empleos, en el contexto económico actual se empieza, en muchos países, a dedicar esfuerzos en las innovaciones organizativas como instrumento del desarrollo del potencial creativo general.

Esto se debe a que el acto de emprender en sí no sólo es característico del mundo de los negocios o el comercio, sino que es transversal a la sociedad del siglo XXI.

[35]​ Un caso "mixto" es el del emprendedor o emprendimiento social que busca generar beneficios económicos a la par de tener un enfoque desarrollado en potenciar el bienestar humano que trascienda lo económico y beneficie también a la sociedad en su conjunto.

La cultura emprendedora es el conjunto de cualidades, conocimientos y habilidades necesarias que posee una persona, para gestionar un proyecto concreto o su rumbo profesional.

Por eso existen teorías tanto enfocadas en valores, como en relaciones interpersonales y en conjunto, que ayudan al emprendedor a tener una mejor visión sobre cómo actuar y reaccionar ante las diferentes circunstancias que sobre la marcha se le irán presentando.

Se ha reconocido que este conjunto de características es un motor para comprender y fomentar el espíritu emprendedor.

Para fomentar los atributos emprendedores, hay que influir en el desarrollo y la realización de las ideas comerciales.

Son el reflejo de la visión consciente del emprendedor y le hacen moverse para decidir hacia una acción.

Por otra parte, a pesar del origen cultural del emprendedor, en la obra de Morris y Schindehutte se afirma que los emprendedores comparten valores al iniciar un negocio como la independencia, la innovación, la honestidad y el trabajo duro.

La mentalidad emprendedora es la actitud que un empresario responde a un determinado objeto de manera favorable o desfavorable basado en una predisposición aprendida.

Las actitudes son los fundamentos para que el comportamiento humano esté motivado y sienta logros personales.

Actualmente se alude al concepto de “Entrepreneurial Enhancement”, o “potenciamiento emprendedor”, que se refiere a "la mejora progresiva de las habilidades cognitivas, afectivas y conativas en emprendedores potenciales o existentes utilizando neurotecnologías apropiadas".

Puestos ambulantes de comida donde se venden churros y palomitas de maíz (llamadas poc-poc , en Iquitos ). Por este tipo de actividad (negocios de pequeña escala), se denomina a estas personas microempresarios .
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Presentación del iPhone 4 por Steve Jobs en la ' Worldwide Developers Conference (WWDC) ' del año 2010.
Bill Gates y Steve Jobs en 2007
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