También es un componente minoritario de las lipoproteínas del plasma humano aunque es el lípido aniónico más abundante.
Variaciones en el contenido o estructura de cardiolipina se han descrito en numerosas alteraciones patológicas.
La forma dimérica se enlaza con cuatro cadenas de ácidos grasos denominados grupos acil.
[3] Una segunda ruta hasta el fosfatidato la construye la fosforilación de un diacilglicerol por una quinasa específica.
Se desplaza seguidamente la citidina monofosfato (CMP) mediante un ataque nucleofílico por el otro hidroxilo.
Por lo tanto, puede retener electrones mientras almacena protones para cederlos o absorberlos para mantener el pH.
La reacción más importante del proceso consiste en que el citocromo c actúa como una enzima peroxidasa interactuando específicamente con la cardiolipina para oxidarla.
Como resultado de esta reacción la cardiolipina se desplaza a la membrana mitocondrial externa donde crea un poro en la membrana que permite que el citocromo c salga al exterior de la mitocondria.
Además, la cardiolipina en la membrana mitocondrial externa anclará una proteína denominada caspasa que también es un factor clave en la apoptosis.
Finalmente, el citocromo c se unirá al IP3, que es un receptor específico del retículo endoplasmático para la descarga de calcio en la célula hasta alcanzar niveles tóxicos.
Además, puede ayudar al anclaje del colesterol en la membrana y un estimulador para la formación de esteroides.
En los metáfitos superiores también forma parte del fotosistema II que está involucrado en procesos oxidativos para la obtención de ATP.
[4] Finalmente, otros procesos en los cuales está involucrada pero aún no se conoce muy bien su papel estructural, puede ser la división celular así como la esporulación.
[10] Como se ha descrito anteriormente, la cardiolipina únicamente se encuentra en las membranas bacterianas y en las mitocondriales interna y presenta diversas funciones descritas a continuación como por ejemplo un papel sumamente importante en la fosforilación oxidativa.
Además se puede observar infecciones bacterianas debidas a la neutropenia (reducción del número de glóbulos blancos del tipo neutrófilos), fatiga y baja talla; aunque no suelen ser muchas (solo una o dos) las anormalidades presentes en los niños y frecuentemente mal diagnosticadas.
[12][13] No hay un tratamiento específico, pero cada problema individual puede ser satisfactoriamente controlado, y tanto la enfermedad cardíaca como la baja talla a menudo se resuelven totalmente después de la pubertad.
Si una mujer con sífilis se quedara embarazada podría pasársela al feto vía cordón umbilical.
Por todo ello es necesaria la presencia de una buena prueba diagnóstica que nos permita detectar la enfermedad fiablemente.
Por consiguiente, mientras parece que no hay cambios en los niveles y metabolismo de cardiolipina en el corazón de rata, un futuro estudio es requerido para aclarar el papel que pueden desempeñar cambios en la cardiolipina en otros órganos afectados por la diabetes.
[16] Los autores del estudio propusieron que esas alteraciones se pueden interpretar como una resistencia de la membrana mitocondrial a los desórdenes provocados por el etanol.
Entonces, cuando hay una infección bacteriana o viral, o cuando las células normales del cuerpo se transforman en células cancerígenas, el sistema inmunológico responde con la producción de anticuerpos específicos contra los antígenos "no propios".
Algunas veces, sin embargo, el sistema inmunológico empieza a producir anticuerpos contra los componentes normales del cuerpo.
[17] El término "síndrome anti-fosfolípido" ha sido definido para abarcar a pacientes que presentan estas manifestaciones clínicas en asociación con anticuerpos anti-cardiolipina en las categorías IgM e IgG.
Desarrolló un método para el aislamiento de cardiolipina que hoy en día aún se sigue utilizando.
[18] Estas propiedades para el aislamiento son: Aun así, la separación y cuantificación de la CL ha sido un reto.
El indicador mitocondrial fluorescente, “nonyl acridine orange” (NAO) fue introducido en 1982, y fue posteriormente descubierta para la selección de las mitocondrias mediante su unión a la CL.
Recientemente, varios artículos han sido publicados en los cuales se usaba el ESI-MS para el análisis de la CL.
Los anticuerpos anticardiolipina (ACA) son anticuerpos generalmente dirigidos contra la cardiolipina y se encuentran en diversas enfermedades como la sífilis,[20] el síndrome antifosfolípido, vasculitis crónica, insuficiencia vertebrobasilar, síndrome de Beheçet,[21] aborto espontáneo idiopático[22] y lupus eritematoso sistemático (SLE).
En la artritis reumatoide[23] con esclerosis sistémica (escleroderma) estos anticuerpos pueden actuar en dos enfermedades al mismo tiempo.