Diócesis de Creta
El apóstol Pablo de Tarso visitó la isla de Creta hacia el año 64 durante su tercer viaje misionero estableciendo un grupo cristiano en la isla y dejando a Tito como su primer obispo.En 1213 los venecianos convirtieron las diócesis ortodoxas de Creta en diócesis católicas latinas dependientes del papa, erigiéndose la arquidiócesis metropolitana de Creta o Candia, por lo que el metropolitano griego debió refugiarse en Nicea.Posteriormente se erigieron en la isla otras 10 diócesis de rito latino, entre ellas Cidonia, con sede en La Canea.[1] En 1890 600 fieles católicos estaban registrados en toda la isla y había 300 a mediados del siglo XIX.De 1939 a 1952 la sede estuvo gobernada por administradores apostólicos sin carácter episcopal.