En la mayoría de las especies, el tallo es aéreo, circular o angular en sección transversal.
[1] Los rizomas están formados por brotes laterales más o menos largos que nacen de la base del tallo aéreo.
Nacen alternadamente desde subnudos ubicados en los tallos aéreos y presentan un crecimiento horizontal bajo la superficie del suelo.
[2] Los tubérculos pueden presentar una forma alargada, redondeada u oblonga; su color, en tanto, puede ser blanco, amarillo, violeta o rojizo.
Los estambres pueden ser iguales o desiguales, los filamentos son en general cortos e insertos en la base de la corola.
El fruto es una baya, generalmente globosa y carnosa, algunas veces ovoide o elípsoide, pero ocasionalmente seca, con muchas semillas chatas.
62[3], 1719; fue validado, más de 30 años después, por Carlos Linneo y publicado en Species Plantarum, vol.
Los análisis filogenéticos sobre datos moleculares han permitido establecer o confirmar que los géneros Lycopersicon, Cyphomandra, Normania, y Triguera, previamente considerados independientes, en realidad se deben incluir dentro de Solanum.
Muchas especies del género presentan tubérculos y constituyen el grupo económicamente más importante.
Existen también varias especies cultivadas en menor escala por sus frutos, tubérculos u hojas comestibles y también como fuente de alcaloides medicinales valiosos.