Los franceses ocuparon el Valle de Arán, pero no pudieron seguir avanzando en territorio catalán.
Pero se encontraron la retirada cortada en el collado de las Panizas (la actual Pertús) y en La Massana.
Una parte del ejército francés quiso cruzar igualmente por el collado de las Panizas, en La Junquera.
Los aragoneses atacaron la retaguardia de las tropas francesas que se batían en retirada, diezmadas por las enfermedades.
Los franceses rindieron todas las villas que aún tenían en el Ampurdán y Gerona, pero seguían controlando el Rosellón.