Coleccionismo de minerales

Muchos reyes fueron también coleccionistas, considerando los minerales, además de por su interés científico, por su utilidad como gemas o como medicamentos.

Los más importantes son los de Conrad Gessner, Johannes Kentmann, Francesco Calzolari, Ulisse Aldrovandi, Jean Bauhin, Ferrante Imperato y el más notable, el libro que describe la colección preparada en el Vaticano por Michele Mercati.

[1]​ El censo de coleccionistas de minerales entre 1530 y 1799 asciende a unas 1.200, teniendo en cuenta que este número incluye solamente las grandes colecciones, aquellas que se conservan al menos parcialmente o que dejaron como prueba de su existencia catálogos realizados en vida del coleccionista o posteriormente a su muerte, para dispersarla en ventas y subastas.

Sin embargo, existen otros tipos de colección más especializada.

[4]​ En general, los museos y especialmente los coleccionistas particulares, suelen optar por tamaños más reducidos.

En la revisión de ejemplares especialmente notables en manos privadas realizada por W.A.

Actualmente, este tipo de coleccionismo es muy popular, dado que permite conservar miles de ejemplares en poco espacio, el coste suele ser, en general, menor que el de los ejemplares grandes, y los microcristales suelen tener una calidad mucho mayor (transparencia,, brillo y perfección morfológica) que los grandes.

[6]​ La multiplicidad de actividades implicadas en el coleccionismo de micromontajes, desde la recolección del muestras al intercambio, ha hecho que se utilizara incluso como actividad terapéutica para enfermedades mentales.

En España, la más importante es la llamada Expominer, que se lleva a cabo en noviembre en la Feria de Barcelona.

Esta viene determinada fundamentalmente por la calidad del ejemplar (tamaño, brillo, que no tenga daños que lo afeen) por su rareza (tanto por la especie) y en el caso de las gemas y los metales preciosos también por su valor intrínseco, aunque muy condicionado por los factores anteriores.

Los que se consideran los diez más importantes del mundo son:[19]​ Existen una serie de revistas en la interfase entre la mineralogía científica y el coleccionismo, publicadas en distintos países e idiomas.

Si contenido, característico, es conceptualmente semejante en todos los casos, y en su mayor parte consiste en dos bloques: los artículos dedicados a la mineralogía topográfica, de nivel muchas veces comparable a los de las revistas científicas habituales, pero con muchas más ilustraciones fotográficas en color, y los destinados a describir las novedades en las ferias de minerales que tienen lugar en todo el mundo.

Las más importantes son: The Mineralogical Record, revista estadounidense, publicada en inglés, que comenzó a editarse en 1970.

Lapis, editada en Alemania desde 1975, en idioma alemán, se publican once números por año.

Le Regne Mineral, publicada bimestralmente en Francia desde febrero de 1995.

An historical look at women in mineral collecting.

Grabado de Antonio Eisenhot en el que aparece la colección de minerales del Vaticano, tal como lo organizó Michele Mercati en la década de 1570.
Colección de minerales de Joannes Ketmann.
Mueble para conservar micromontajes de minerales
Vitrina con minerales montados al estilo antiguo en la colección del Museo Nacional de Praga