El instrumento estaba pensado para reemplazar al órgano en las ceremonias religiosas que se desarrollaban fuera de los templos o en capillas modestas.
comenzó a fabricarse en Alemania en 1864 y al año siguiente ya había un ejecutante, el negro José Santa Cruz, que según se dice entretenía a los soldados en la Guerra de la Triple Alianza.
[2] En sus comienzos el tango era interpretado generalmente por un trío de violín, guitarra y flauta.
Esta “humanización” del instrumento también siguió un camino inverso cuando Troilo quedó identificado con el objeto cuando Julián Centeya lo llamó “El Bandoneón Mayor de Buenos Aires”.
Troilo debió entonces postergar el ingreso hasta que finalizaran esos bailes, y su primera grabación con el cantor fue justamente el tango Che, bandoneón.