[6] No se sabe exactamente ni la patria ni el origen del emperador, sin embargo, la Historia Augusta hace varias suposiciones sobre este tema: Los historiadores modernos, apoyándose en los autores latinos Aurelio Víctor,[8] Flavio Eutropio,[9] Jerónimo[10] y Sidonio Apolinar[11] y el griego Juan Zonaras,[12] creen que Caro nació en Galia Narbonense o, más concretamente, en su capital Narbona,[13] lo que ocasionó la interrupción de la serie sucesiva de emperadores ilíricos de aquella época.[16] Asimismo, la Historia Augusta lo incluye en la lista de generales a los que el propio emperador Probo formó.A finales de 282, cuando este último estaba en Sirmio, las legiones de Recia y Nórico se rebelaron, y en consecuencia, declararon emperador al prefecto del pretorio Caro, quien estaba preparando el ejército para la campaña planeada por Probo contra los persas.Probo envió a tropas contra los rebeldes, pero cambiaron inmediatamente de bando y el emperador terminó siendo asesinado por sus guardaespaldas.[14][6] Además, al año siguiente, Carino fue cónsul junto con su padre y fue ascendido al cargo de augusto, es decir, se convirtió en coemperador junto a Caro, y Numeriano se casó con la hija del nuevo prefecto del pretorio Arrio Apro.[2] En honor a esta victoria, Caro y sus hijos obtuvieron el apelativo honorífico de «Germánico Máximo» (en latín: Germanicus Maximus).[2] Mientras estaban en campaña en Asia, Caro designó a su hijo Carino para mantener el orden en las provincias occidentales, especialmente en la Galia.[2] La campaña persa había sido planeada bajo Aureliano, quien no tuvo tiempo de llevarla a cabo porque fue asesinado durante su travesía hacia el este.Probo, por su parte, también deseaba recuperar las tierras perdidas, pero tampoco tenía tiempo para hacer realidad ese plan, por lo que, en consecuencia, Caro fue el único capaz de realizar esa campaña contra los persas.Las operaciones se vieron favorecidas por los disturbios internos del estado persa durante el reinado de Bahram II,[18] que estaban encabezados por Hormizd, su propio hermano, quien se rebeló contra él e intentó crear un estado independiente en la parte oriental del Irán sasánida.[22] Al enterarse de los planes romanos, los persas se alarmaron por lo que decidieron retrasarlos con largas negociaciones.[23] Después, continuaron a través del curso del río Tigris, sin encontrar resistencia en su camino, ya que el rey persa Bahram II, distraído por los disturbios internos, no tuvo la oportunidad de enviar tropas para la defensa contra los romanos.[20] El poeta y dramaturgo alemán August von Platen-Hallermünde dedicó la balada «La muerte de Caro» al emperador homónimo.