Su nombre probablemente derive del nombre de una tribu ilírica llamados los dalmatae (dálmatas) que vivieron en la zona de la costa adriática oriental en el primer milenio a. C. La región era la parte septentrional[2] del reino ilírico entre el Siglo IV a. C. hasta las guerras ilíricas de los años 220 a. C. y 168 a. C. cuando la República Romana estableció su protectorado al sur del río Neretva.
La región al norte del Neretva fue lentamente incorporada a las posesiones romanas hasta que la provincia de Iliria fue establecida formalmente hacia los años 32-37 a. C. La región dálmata entonces se convirtió en parte de la provincia romana de Ilírico (Illyricum).
[3] El historiador Theodor Mommsen escribió (en su obra Las provincias del Imperio Romano) que toda Dalmacia fue plenamente romanizada y hablaba latín para el siglo IV.
A pesar de que los ilirios se vieron sometidos a un proceso intenso de aculturación, siguieron hablando su idioma nativo, venerando a sus propios dioses y tradiciones, y siguieron su propia organización tribal político-social que se adaptó a la administración y estructura política de Roma solamente en contados aspectos.
Wilkes abarca Iliria y Dalmacia, en sus aspectos romanizados, hasta el final de la Antigüedad, basándose principalmente en la evidencia de inscripciones y los antiguos historiadores.