La provincia de Cuenca se divide en tres grandes comarcas naturales: la Serranía, la Alcarria y La Mancha.
La principal, es la carretera CM-211 que une, de forma más rápida, Cuenca con la autovía A-3 en dirección a Valencia.
Campillo se sitúa a tan solo 9 km de Motilla del Palancar.
Es el característico municipio castellano, en el que destaca su llamativa torre, visible desde varios kilómetros alrededor.
La superficie total del municipio ronda los 173 km, tierras que encuentran en el norte, este y oeste alineaciones montañosas pertenecientes a la Cordillera Ibérica, pero que en el sur descubren la impresionante llanura manchega, sobre la cual se sitúan gran cantidad de viñedos.
Por el término municipal no discurre ningún curso continuo de agua, si bien tiene varias ramblas y barrancos.
Las precipitaciones durante el año no suelen superar los 600 mm, siendo las estaciones más lluviosas las de la primavera.
El Rey Alfonso II de Aragón envió tropas al Rey castellano y en recompensa por esta ayuda Alfonso VIII otorgó tierras y posesiones a un noble aragonés apellidado Jaraba, en el lugar donde actualmente se encuentra Campillo de Altobuey.
Este reconocimiento fue ampliado por Felipe III al conceder los apelativos de "muy noble y leal villa".
Campillo una vez fue declarada villa independiente tenía derecho a dos alcaldes de mesta, dada la importancia que tenía la localidad puesto que por aquí pasaba el antiguo camino Real de Madrid a Valencia central, llamado Camino de las Cabrillas y la antigua calzada romana que conducía a CesarAgusta, (Zaragoza).
Además tenía derecho a cobrar portazgo por salir de un puerto seco (el Pajazo).
Se practica un policultivo de diferentes productos, como cereales, viñedos, olivo, lentejas y ajos.
Campillo ha sido siempre conocido por su azafrán, y aunque ha disminuido mucho su cultivo, existe una iniciativa empresarial para comercializarlo a nivel nacional e incluso internacional.
Existe la Cooperativa Agrícola San Andrés Apóstol, que cuenta con alrededor de 800 socios.