Fue construido en grandes cantidades y la producción continuó por muchos años tras el fin de la guerra.
Esto le permitía a su estructura aérea ser más ligera que una construida en madera de la misma fortaleza.
Su fuerte construcción le permitía soportar bastante daño, era fácil de pilotar y tenía un buen desempeño.
El piloto y el observador/artillero se sentaban muy próximos en cabinas abiertas dispuestas en tándem.
Los Bre.14 B.2 realizaron muchas incursiones diurnas en formaciones masivas, penetrando muy profundamente en las líneas alemanas.
También se desarrolló una versión caza biplaza conocida como el Breguet 17, la que fue construida en pequeñas cantidades.
La versión empleada en las colonias lejanas fue el Breguet 14 TOE (Théâtres des Operations Extérieures).
Con las fuerzas francesas este avión representó un papel muy activo en las sangrientas represiones a raíz de los frecuentes levantamientos contra los insurgentes sirios y marroquíes desarrolladas a lo largo de los años veinte; la guerra contra los rebeldes marroquíes no acabaría hasta 1934.
En la misma época España envuelta también en una violenta lucha en su propio sector de Marruecos, utilizaba cuatro escuadrones equipados con Breguet 14 en 1922, complementados en 1923 con 40 Bre.14 más.
Se añadieron a ellos 52 aparatos de la variante Breguet 14T bis Sanitaire (ambulancia).
Francia había continuado utilizando las ambulancias aéreas para la evacuación de heridos en primera línea, y se construyó esta versión del Breguet 14T bis civil en ciertas cantidades, para prestar servicio en ultramar.
El Breguet 14 continuó sirviendo en escala considerable a lo largo de los años veinte con la Aéronautique Militaire francesa en misiones de entrenamiento y los últimos ejemplares fueron retirados del servicio militar francés en 1932.
Una versión mejorada de este modelo fue el 14T bis manufacturado tanto como avión convencional e hidroavión.