Los actuales apelativos rumanos y húngaros derivan de la palabra eslava, barasu, que significa fortaleza.
El nombre alemán, Kronstadt significa "Ciudad Corona" y se refleja en el escudo de la ciudad, así como en la denominación medieval latina de "Corona".
[1] Los testimonios arqueológicos indican la presencia de unas grandes culturas neolíticas (Noua, Tei, Schnekenberg) en el territorio del actual municipio.
Hasta el siglo XIII de nuestra era, no hay ningún documento mencionando a Brașov.
Sin embargo, es observable la continúa habitación, especialmente en las zonas de Șchei o Bartolomeu.
El actual municipio se formó por la unión de varios núcleos : Bartholomä, Martinsberg, Cetatea (Corona), Șchei, Blumăna, Noua, Dârste, Stupini.
Sin embargo los documentos y las fuentes seguras no confirman ésta fecha.
Se construye en Brașov, en 1228, un monasterio de monjas premonstratenses, situado al lado de lo que será la Iglesia Negra, teniendo como patrono a Santa Catharina.
En 1241 tuvo lugar una invasión tártara, y fue conquistada la fortaleza Șprenghi, cuyos comienzos se desconocen (probablemente se construyó sobre el sitio de un antiguo castro romano).
Killyen, refiriéndose a este documento, muestra que el nombre "Barasu" indica en realidad la denominación de una entera región.
En este caso "Brașov" se refiere a una zona, mientras que "Corona" sería la localidad.
De aquí empieza la mención cada vez más frecuente del municipio: Brașov (1294), Brassov (1295), Brasso (1309), Brassou (1331) o Korona (1336).
Se pueden mencionar aquí los herreros, los peleteros, los pañeros, los sogueros, los correeros, los boteros, los cuchilleros, los zamarreros, los carniceros, los oreros, los estañeros, los cobreros, los panaderos, los alfareros, los cerrajeros, los tejidores, los armeros, los arqueros, los goreros, los laneros, los plateros.
En 1486 Braşov y la entera Țara Bârsei entran en la Universidad Sajona, a través de la confirmación del privilegio "Andreanum" para todos los sajones de Sibiu, Mediaș, Brașov y Țara Bârsei.
Tres años después se construye en madera Cetățuia, una fortaleza de Dealul Cetății.
Incendiada en 1618, será reconstruida en 1625, añadiéndose un pozo con 81 m de hondura (1627) y cuatro bastiones en las esquinas (1630).
El Diácono Coresi publicó en Brașov en 1559 su primer libro en rumano Întrebare creștinească ("Pregunta cristiana").
Después de conquistar Transilvania, organizará la primera dieta en Casa Sfatului.
En 1628, el protopopo Vasile de Șcheii Brașovului escribe la primera crónica local sobre un tema exclusivamente rumano.
En el año 1838 aparece, bajo la protección del emperador vienés, Gazeta de Transilvania, con George Bariț como redactor.
Es el primer periódico rumano del Gran Principado de Transilvania.
También se publica en Brașov Foaie pentru minte, inimă și literatură ("Hoja para mente, corazón y literatura").
Se redactó aquí el documento programático Nuestros principios para reformar la patria, por los líderes culturales y políticos de Moldavia (Alexandru Ioan Cuza, Vasile Alecsandri, Alecu Russo, Costache Negri, Gheorghe Sion, Ion Ionescu de la Brad).
Posteriormente hubo obras de consolidación en Casa Sfatului, Poarta Șchei, Liceul Sportiv y otros edificios afectados.
La rebelión fue reprimida por las fuerzas comunistas y sus líderes fueron encarcelados, torturados e incluso deportados.
Se encuentra situada a 161 km de Bucarest y entre los municipios de los alrededores se encuentran Predeal, Bușteni, Sinaia, Făgăraș y Sighișoara.
Existe una línea especial que conecta la ciudad con Poiana Brașov, un resort invernal cercano.
Existen trenes diarios a Bucarest y Budapest (via Oradea), ciudad a la que también se puede llegar desde Brașov mediante el tren EuroNight via Arad.
Los mejores periodos para visitar a la ciudad se extienden de mayo a septiembre para disfrutar del verano templado, y de diciembre hasta febrero para participar en las actividades invernales.