fue un militar español que participó en el descubrimiento y conquista del Perú.
[1] En Panamá se relacionó con Francisco Pizarro y Diego de Almagro, personajes que por esa época se asociaban para emprender la conquista de los territorios situados más al sur, que ya empezaban a ser conocidos como el Perú.
Permaneció en San Miguel, mientras Pizarro y el grueso de su hueste marchaba a Cajamarca.
Este atendió su pedido y envió a Sebastián de Benalcázar con diez jinetes.
[1] Durante las guerras civiles entre los conquistadores del Perú, se mantuvo leal al bando de la Corona, pero debido a su mal físico, no quiso involucrarse directamente en las acciones militares y se limitó a colaborar con su peculio.
Acompañó al ejército realista hasta la batalla de Jaquijahuana, pero no luchó pues se hallaba ya casi ciego (1548).
[1] Pacificado el Perú, regresó a Trujillo, donde fue una vez más alcalde en 1549 y posteriormente procurador general.