Bernardino López

Peleó en el desastre de Arroyo Grande y a continuación huyó al Brasil.

Cuando el ejército fue nuevamente puesto a órdenes del general Paz, fue ascendido al grado de coronel.

Pero el gobernador Pascual Echagüe recibió refuerzos de Buenos Aires y los obligó a retirarse un mes después.

La mayor parte del ejército se perdió, pero sus jefes regresaron a Corrientes.

En marzo de 1854, el mismo general Cáceres invadió Corrientes desde el sur, y tomó Curuzú Cuatiá.