Termas romanas de Bath

Las termas propiamente dichas se sitúan por debajo del nivel de la calle y los edificios construidos a raíz de su descubrimiento se pueden dividir en cuatro grupos entre los que están el «Manantial Sagrado», el Templo Romano, el Baño Romano y la Casa Museo.Los baños suponen una gran atracción turística y pueden llegar a recibir un millón de visitantes al año.En 1983 apareció un nuevo hoyo en el interior del complejo que aseguraba un suministro continuo y limpio de agua a las instalaciones.[3]​ El primer santuario de aguas termales erigido en este lugar fue construido por los celtas,[4]​ que lo dedicaron a la diosa Sulis, cuyo equivalente romano sería Minerva.[10]​ El manantial está actualmente localizado en el interior de un complejo construido en el siglo XVIII por los arquitectos John Wood (padre e hijo).Smith restauró el rumbo del agua a su curso original y los baños se llenaron sin ningún problema.Entre los distintos descubrimientos realizados en la zona, se han encontrado 12 000 monedas romanas, que suponen la mayor ofrenda votiva de Gran Bretaña.En la entrada había cuatro grandes columnas acanaladas de estilo corintio que sostenían un friso y un frontón triangular decorado.[20]​ No obstante, existe un debate en relación con si este relieve representa una gorgona, ya que esta criatura es normalmente del sexo femenino.[22]​ Las piezas dentro del templo son vulnerables al aire caliente que tenía el efecto de depositar sales corrosivas.Los análisis realizados a estas aguas muestran que contienen sodio, calcio e iones de cloruro y sulfato en altas concentraciones.En las cercanías de los baños romanos se construyó un edificio conocido como Thermae Bath Spa, diseñado por Nicholas Grimshaw & Partners.
Baño romano.
El Gran Baño — toda la estructura construida por encima del nivel de las bases es una reconstrucción.
Entrada a los baños del Rey y de la Reina.
Cabeza de Gorgona, encontrada en el frontón del templo.
Estatuas en la terraza.
Baños romanos.