A la edad de dieciocho años, en 1787, encontró trabajo como auxiliar para Edward Webb, topógrafo.
Permaneció allí durante ocho años, trabajando primero para Webb y más adelante para el Somersetshire Coal Canal Company.
En 1794 le propusieron hacer un viaje de observación con respecto a la navegación interior.
Después de residir en Littleton, hasta 1795, tres años más tarde compró un pequeño terreno en Midford, cerca de la ciudad, en donde William trabajó como ingeniero residente del canal del carbón.
Esto dio a Smith una hipótesis comprobable, que llamó el principio de sucesión faunística, y comenzó su búsqueda para determinar si las relaciones entre los estratos y sus características eran constantes a través del país, durante recorridos sucesivos, primero como topógrafo (designado por el ingeniero Juan Rennie) para la compañía del canal, hasta 1799 cuando lo despidieron.
Tenía conocimiento de la historia natural, y ayudó a Smith a aprender los nombres y la naturaleza verdadera de los fósiles, mientras que Smith puso sus especímenes en orden según los estratos.
Smith después trabajó como topógrafo itinerante por muchos años hasta que uno de sus patrones, sir John Johnstone, lo reconoció y lo acomodó, procurándole el respeto que se merecía.
Estaba en esta ocasión el presidente, Adán Sedgwick, quien se refirió a Smith como "el padre de la geología inglesa”.
En 1838 lo designaron en una de las comisiones para seleccionar el edificio para el palacio nuevo del Parlamento.
En 1891 se erigió un monumento a su memoria en su lugar de nacimiento, Churchill.