[2][3] También resultaron heridos el escolta y algunas personas que se encontraban en las inmediaciones.Con su asesinato, se ponía fin a uno de los más duros opositores del presidente en ejercicio, razón por la cual el exministro Fernando Botero Zea y muchos otros han calificado el magnicidio como crimen de estado en el gobierno del expresidente Ernesto Samper Pizano, quien ha sido investigado directamente por dicho crimen junto a su entonces Ministro del Interior, Horacio Serpa Uribe.[6][7] Samper ha sido señalado como el autor intelectual del magnicidio en repetidas ocasiones por importantes criminales de la época, hoy sometidos a la justicia.[14] En 2015, la Fiscalía de la Nación adelantó la hipótesis de que en el asesinato estuvieron implicados miembros de las fuerzas militares, particularmente el cuestionado general retirado Rito Alejo del Río, quien se encuentra preso por vínculos con el paramilitarismo, gracias a las declaraciones en 2005 del paramilitar desmovilizado Edwin Zambrano (William).Igualmente otros miembros del llamado Grupo Cazador declararon contra los oficiales mencionados afirmando que habían ideado el crimen en alianza con políticos y narcotraficantes del Valle del Cauca y la Costa Caribe y habría sido organizado y ejecutado por paramilitares al servicio de Carlos Castaño debido a la necesidad de acallar la propaganda de oposición del líder conservador al gobierno de Samper.[17][18] Después del asesinato de Gómez Hurtado se cometieron varios asesinatos de personas que la investigación adelantada por la familia considera estarían vinculados al magnicidio del líder conservador.Sin embargo, Enrique Gómez Martínez, sobrino de Gómez Hurtado quien asumió la dirección del caso, no solo descubrió la inocencia de Flórez sino que ha asumido su defensa desde entonces.Tras pasar 14 años en prisión, Flórez obtuvo su puesta en libertad en 2014 por buena conducta, trabajo y estudio.Flórez aun reclama su inocencia y debido a su condena vive en la pobreza.El 19 de febrero son asesinados en la carrera 19 con calle 27 en Bogotá Clara Valencia Linares y Hugo Roberto Otálora.[37] En particular, miembros de la familia del asesinado Gómez se han negado a aceptar la autoría de las FARC-EP, sugiriendo que corresponde a una estratagema para evitar que los verdaderos responsables sean encontrados y procesados.[38][39] Dentro de esta investigación, la Fiscalía General de la Nación llamó a declarar a la excongresista Piedad Córdoba (quien argumenta tiene las pruebas sobre este magnicidio)[40] y a figuras importantes del extinto Cartel de Cali, como los hermanos Miguel Ángel y Gilberto Rodríguez Orejuela, Guillermo Pallomari, Fernando Henao Montoya, Santander Lopesierra y Víctor Patiño Fómeque.En tal folio, contrario a lo que declaró Carlos Antonio Lozada, se expresa que el crimen había sido ejecutado por una milicia urbana bolivariana afiliada a la guerrilla y no por la Red Urbana Antonio Nariño.A su vez se data que durante una interceptación telefónica fija se descubrió que un sujeto desconocido había estado buscando y reclutando desmovilizados de las FARC-EP para realizar operaciones de sicariato entre las que destacaron el magnicidio de Gómez Hurtado y del atentado al abogado Antonio José Cancino (crimen que no había admitido el grupo FARC-EP en su declaración).