Archivo Ringelblum (Oneg Shabat)

Ahora se encuentran en la Memoria del Mundo, que incluye los documentos más valiosos de la literatura mundial.

Tłomackie (actualmente sede del Instituto Histórico Judío de Emanuel Ringelblum).

Lo que distinguía al "Archivo Ringelblum" era, en particular, su carácter clandestino y su total independencia del Judenrat.

[2]​ El grupo de Oneg Shabat estaba bien arraigado en las estructuras subterráneas del gueto.

Sus miembros colaboraron con una amplia gama de grupos políticos, desde el ortodoxo Agudat Israel, pasando por el Bund y Poalei Zion, hasta el PPR.

En 1940-1943, alrededor de 50-60 personas (incluidos copistas, mecanógrafos y otro personal técnico) colaboraron con el archivo clandestino del gueto.

[2]​ A pesar de estas diferencias, el archivo clandestino siguió siendo un grupo muy unido.

El Oneg Shabat no es una asociación de científicos que compiten entre sí y se pelean, sino una organización unificada, una unión fraternal en la que todos se ayudan y luchan por el mismo objetivo.

Sin embargo, sus miembros fueron principalmente: Ringelblum, Hersz Wasser, Eliahu Gutkowski, Icchak Giterman, Menachem Mendel Kon, Jehoszua Rabinowicz, Szmuel Winter, Aleksander Landau, Eliezer Lipe Bloch, Daniel Guzik y Abraham Lewin.

Rabinowicz era también un vínculo informal entre Oneg Shabbat y la agrupación política más fuerte del gueto: el Bund socialista.

[2]​ El grupo de colaboradores habituales de Oneg Szabat incluía, entre otros escritores y periodistas (Rajel Auerbaj, Leib Goldin, Yehuda Feld, Gustav Jarecka, Henry Łazowertówna, Peretz Opoczyński, Yehoshua Perle, Zalman Skalow, Cecilia Słapakowa),[2]​ maestros ( Bernard Kampelmacher Aron Koniński, Abraham Lewin, Israel Lichtensztajn )[2]​ y economistas (Menachem Linder, Jerzy Winkler).

Este grupo incluía a Natan Smolar, Nechemiasz Tytelman, Mordechaj Szwarcbard, Jechiel Górny y Izrael Lichtensztajn, antes mencionado.

Fueron en particular: Szlomo Gilbert, Itzhak Katzenelson, Josef Kirman, Kalman Lis y Władysław Szlengel.

[2]​[1]​ La adhesión de los alemanes a la " Solución final " hizo imposible finalizar este trabajo.

[3]​ Bajo la misma modalidad, Oneg Shabat también recopiló correspondencia y diarios, e incluso organizó concursos literarios destinados a recopilar informes y observaciones de judíos sobre temas de interés para los investigadores.

[4]​[2]​ Para asegurar la información obtenida, se hicieron copias de muchos documentos y estudios.

[3]​ Los archivos del gueto también fueron apoyados por patrocinadores privados, como Menachem Mendel Kon, Szmuel Winter, Jehoszua Rabinowicz y Aleksander Landau.

[3]​ Entre las víctimas llevadas a Treblinka o fusiladas en las calles del gueto estaban, entre otras Szmuel Bresław, Daniel Fligelman, Szymon Huberband, Józef Kapłan, Aron Koniński, Henryka Łazowertówna, Cecylia Słapakowa, Nechemiasz Tytelman y Jerzy Winkler.

Como resultado, las actividades de Oneg Shabat se paralizaron durante varios meses.

Gustawa Jarecka, Abraham Lewin y Perec Opoczyński quienes murieron al mismo tiempo.

Poco más de un mes después, Ringelblum y Wasser abandonaron el gueto para esconderse en el "lado ario".

[2]​ Mientras tanto, desde el verano de 1942, se intentó ocultar los documentos copilados por Oneg Szabat.

Ringelblum confió esta tarea a Izrael Lichtensztajn, quien fue apoyado por dos jóvenes estudiantes: Dawid Graber y Nachum Grzywacz.

[2]​ En febrero de 1943, la segunda parte del archivo también se escondió en el mismo lugar.

[2]​ Después de escapar del gueto, Ringelblum, junto con su esposa e hijo, se refugi{o en un albergue subterráneo en ul.

Allí continuó documentando el destino de los judíos en la Polonia ocupada, escribiendo, entre otras cosas, su famoso ensayo sobre las relaciones polaco-judías durante la Segunda Guerra Mundial.

[2]​ La segunda parte del archivo, escondida en el mismo edificio, fue descubierto accidentalmente por trabajadores polacos en diciembre de 1950.

[2]​ En 2003, se hizo un intento más para encontrar la parte perdida del "Archivo Ringelblum".

[3]​[6]​ Se almacena en una bóveda especial y moderna en el primer piso de la Biblioteca Judaica Principal en ul.

Constituyen uno de los recursos archivísticos más importantes para la historia del Holocausto en la Polonia ocupada.

Tres cajas de metal y dos latas de leche en las que se escondían materiales de Oneg Szabat
Uno de los documentos de Oneg Shabat: estadísticas de las víctimas de la Grossaktion en el gueto de Varsovia en el verano de 1942
Fragmento de la galería del Holocausto dedicada a Oneg Shabat en el Museo de Historia de los Judíos Polacos
Placas en la entrada del edificio del Instituto Histórico Judío en conmemoración de Emanuel Ringelblum y el archivo subterráneo del gueto
Botella de leche original en exhibición permanente Que no podíamos gritar al mundo en el Instituto histórico Judío
Fragmento de la exposición Luz negativa en el Instituto histórico Judío con 76 fotografías conservadas del archivo ringelblum que muestran la comunidad cerrada del gueto de Varsovia (2019)
Conmemoración del Archivo Ringelblum en la plaza situada en la calle Nowolipki 28 y 30 el día de la inauguración