Inodoro

La tecnología utilizada para los escusados modernos varía; suelen estar hechos de cerámica (porcelana), hormigón, plástico o madera.Los inodoros de avión están especialmente diseñados para funcionar en el aire.Históricamente, el saneamiento ha sido una preocupación desde las primeras etapas de los asentamientos humanos.Por lo tanto, el Objetivo de Desarrollo Sostenible 6 de las Naciones Unidas quiere «lograr el acceso a saneamiento e higiene adecuados y equitativos para todos y acabar con la defecación al aire libre».[10]​ En el Sudeste Asiático se encontró la letrina más antigua de la región.La acción de defecar no suponía un acto íntimo, sino algo que se realizaba en público, compartiendo charla y chanzas, y hasta un palo terminado en una esponja que usaban para limpiarse.Los retretes romanos estaban situados por encima de las alcantarillas abiertas que se «enjuagaban» periódicamente con agua corriente.[15]​ En Pompeya las letrinas públicas y privadas desaguaban en pozos negros que estaban situados bajo las aceras.En el complejo de Abhayagiri, en Anuradhapura, se conocen retretes y baños que datan de los siglos II a. C. al III d. C. En Polonnaruwa y Anuradhapura, los retretes del siglo V d. C. al X tenían elaborados motivos decorativos tallados alrededor.John Harington describió en 1596 un predecesor del inodoro que se vaciaba mediante una válvula.Por su posición, la cisterna alta requiere menos cantidad de agua para funcionar.Por el contrario, tiene la ventaja, en aseos públicos colectivos, de que es más difícil estropearlo por vandalismo.Cuando alguien decide hacer uso del inodoro, está inevitablemente contaminando el agua.[26]​ Además, existen muchos tipos de fármacos y otros químicos que no pueden ser eliminados confiablemente en los EDAR.Al parecer, esta posición no es la más eficiente ni la más higiénica para realizar esta necesidad fisiológica, dado que el organismo humano no ha evolucionado para defecar en la posición de sentado, sino en cuclillas, al igual que los otros primates.[29]​[30]​ Defecar sentado conlleva un mayor gasto de oxígeno corporal, en especial en asmáticos o ancianos con enfermedades respiratorias y pueden quedarse faltos de oxígeno al tener que soportar su propio peso, la solución es defecar en cuclillas pero que al cuerpo lo soporte un asiento ergonómico.
Inodoro clásico de asiento con la cisterna en la espalda
Un sanitario exterior Sanisette [ 1 ] ​ automatizado
Letrinas públicas romanas, Ostia Antica .
Inodoro a la turca
Sección longitudinal de un inodoro
Esquema de funcionamiento del llenado de la cisterna
Un inodoro para arrojar agua manualmente
Un inodoro para echar agua manualmente
El inodoro SaTo también está diseñado para echar agua manualmente, pero no tiene cierre hidráulico sino una trampilla que se abre con el peso del excremento y el agua y luego se cierra con su propio peso.
Asiento de inodoro elevado eléctricamente para ancianos