Cuando se usa fuera del idioma alemán, suele referirse por antonomasia a Hitler, máxima autoridad de la Alemania nazi.
Como sustantivo, uno sus usos más comunes en el contexto de liderazgo era a través de la palabra Fürst, traducida en español como ‘príncipe’ (en el sentido territorial y no monárquico), incluyendo los príncipes electores (sing.
Con la llegada de los nazis al poder, Führer se convirtió en un título exclusivo otorgado por Hitler a sí mismo, por su función como Vorsitzender (presidente) del Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán.
La adopción de este título por Hitler estuvo inspirada parcialmente por el uso anterior que hizo el austríaco Georg von Schönerer, principal exponente del pangermanismo y del nacionalismo alemán en Austria, al cual sus seguidores se referían comúnmente como Führer, y los cuales también utilizaban el saludo Sieg Heil.
De hecho, Mussolini escogió el epíteto latino "Dux" o il Duce que sería ampliamente utilizado en la Italia fascista aunque, a diferencia de Hitler, Mussolini nunca lo convirtió en su título oficial.
En su testamento político, Hitler también se refería a sí mismo como Führer der Nation.
[12] Führer se ha utilizado como un título militar en Alemania al menos desde el siglo XVIII.
Por ejemplo, el oficial al mando de una compañía es titulado Kompaniechef (literalmente, jefe de la compañía), pero si no tenía el rango o la experiencia necesaria, o sólo se le había asignado temporalmente al mando, se le titulaba oficialmente Kompanieführer.
[13] El término führer se aplicaba asimismo en niveles inferiores, sin tener en cuenta la experiencia o rango; por ejemplo, un Rottenführer era el jefe de un pelotón de infantería (9 o 10 hombres).
Casi cada organización nacionalsocialista, en particular las Schutzstaffel (SS) y las Sturmabteilung (SA), incorporaban el título de führer en sus rangos jerárquicos.
En el ámbito de habla alemana, la palabra aislada führer generalmente se evita en contextos políticos, debido a su íntima conexión con la historia reciente.
La excepción es la palabra oppositionsführer (líder de la oposición parlamentaria), que sí se usa comúnmente.