Según el pintor, durante aquel tiempo se enamoró de Mistral, pidiéndole incluso su mano, pero la poetisa no aceptó.
Según el historiador Hernán Marchant, la relación entre Matta y Le Corbusier estuvo caracterizada por «mucha admiración, pero con cierta rivalidad».
[8] En el Viejo Continente, conoció además a los artistas André Breton, Salvador Dalí, Arshile Gorky y René Magritte.
Fue Breton quien estimuló al artista chileno, valoró su trabajo y lo introdujo en el círculo de los principales miembros del movimiento surrealista parisino.
Durante este periodo trabó amistad con prominentes artistas contemporáneos europeos, como Pablo Picasso y Marcel Duchamp.
Un momento decisivo para la carrera artística de Matta se produjo en 1938, cuando pasó del dibujo a la pintura en óleo, por la cual es muy famoso.
Sus primeras pinturas, entre las que destacó Invasión nocturna, dieron una indicación de la ruta artística tomada por el pintor.
Su primera esposa fue la estadounidense Ann Clark, con quien tuvo dos mellizos, Gordon y John Sebastian (1943), nacidos durante su residencia en Nueva York.
[19] En 1968, se casó con Germana Ferrari, matrimonio que duró hasta la muerte del pintor; de esta última relación nació Alissé (1970).
[17] Roberto Matta demostró en diversas ocasiones su afinidad a un pensamiento político de izquierda, específicamente al socialismo.
[20] En aquella visita, intentó convencer en vano al presidente Eduardo Frei Montalva de reanudar las relaciones con Cuba.
[1] En 1970, regresó a Chile, luego del triunfo de Salvador Allende en las elecciones presidenciales.
[26] Ese mismo año se estrenó un documental sobre el autor titulado Intimatta, dirigido por su hijo Ramuntcho.
La pintura será exhibida en el Centro Pompidou de París, donde también se conservan quince dibujos, cuatro estampas y once cuadros del pintor.