El director estimuló su talento, pero le advirtió que debía perder su fuerte acento escocés para poder progresar como actor.
Tras cumplir su servicio militar en el Ejército (durante el cual trabajó un tiempo como locutor y director teatral del British Forces Broadcasting Service), consiguió una plaza en la Royal Scottish Academy of Music and Drama de Glasgow.
Tras un período en el Old Rep, actuó con la Royal Shakespeare Company (RSC), de la cual fue miembro fundador, entre 1960 y 1975.
[4][5] Aunque más adelante consiguiera la fama gracias a su trabajo cinematográfico y televisivo, Ian Richardson fue principalmente un soberbio actor teatral clásico.
[6] Su primer compromiso fue con el Birmingham Repertory Theatre, y su actuación en Hamlet le facilitó entrar en la RSC.
En 1972 actuó en el musical Trelawney, en el Bristol Old Vic, con un gran éxito, trasladando después la obra a Londres, primero al Teatro Sadler's Wells y después al Savoy.
Esta escena la rodó junto a Patrick Stewart y Ronald Lacey.
[9] Tras dejar la RSC, fue el Profesor Henry Higgins en la versión representada en 1976 en Broadway de My Fair Lady, recibiendo el Premio Drama Desk y una nominación a un Premio Tony.
A lo largo de su carrera Richardson hizo muchas destacadas interpretaciones televisivas.
[5] Gracias a su trabajo ganó el Premio BAFTA al mejor actor televisivo por su trabajo en la primera serie, House of Cards (1990), siendo nominado por su intervención en las dos secuelas, To Play the King (1993) y The Final Cut (1995).
El honor le fue conferido por la rectora de la universidad, la actriz Diana Rigg.