Was Gott tut, das ist wohlgetan, BWV 98

El texto empieza con la primera estrofa del himno "Was Gott tut, das ist wohlgetan" escrito por Samuel Rodigast en 1674.[9]​ El texto del coral se centra en la confianza en Dios, mientras las dos cantatas que había escrito previamente para la ocasión, Ich glaube, lieber Herr, hilf meinem Unglauben, BWV 109 y Aus tiefer Not schrei ich zu dir, BWV 38, ambas partían de la duda y la angustia.Subraya que una oración por la salvación será concedida, en el cuarto movimiento conforme a Mateo 7:7, "llamad, y se os abrirá".Este último movimiento no es un coral, aunque su texto comienza como uno, "Meinen Jesum laß ich nicht" escrito por Christian Keymann en 1658.[9]​ La segunda aria es el movimiento final de la obra, dominada por los violines al unísono siguiendo una estructura similar a la primera.