La elección recayó en la joven Blanca, supuestamente porque el nombre Urraca habría sido inefable para los franceses.
Contrajo esponsales en 1205 con el infante Alfonso de Portugal, hijo del rey Sancho I de Portugal y de su esposa, la reina Dulce de Aragón y dos años después, en 1208, se celebró el matrimonio.
Como era habitual en las consortes, contaron con los ingresos de los bienes, adquiridos, principalmente por donación, se le concedieron señoríos propios: Torres Vedras, Óbidos y Lafões[cita requerida].
Urraca patrocinó varias órdenes, incluidos los franciscanos y dominicos.
[5] Fruto de su matrimonio con el rey Alfonso II de Portugal nacieron los siguientes hijos: