Si bien en el campo científico, la historia del antiguo Israel hasta comienzos del primer milenio a. C. permanece en parte considerable algo desconocida,[2] algunos eruditos modernos son escépticos en cuanto a si alguna vez hubo doce tribus israelitas, y creen que el uso del número 12 probablemente signifique una tradición simbólica como parte de un mito fundacional nacional.
De la unión nació Ismael, del cual descienden los ismaelitas, ya que el relato bíblico narra que finalmente Yahweh concedió a Sara tener un hijo, Isaac; y, debido a tensiones con Sara, Agar fue expulsada.
[6] Tiempo después, un ángel se le apareció a Jacob quien lo re-nombra "Israel", al que Yahweh promete una gran descendencia.
Sus medio hermanos le sentían envidia, así que lo venden a Egipto como esclavo.
Al interpretar un sueño profético del Faraón, fue liberado y elevado a la categoría de chaty.
[9] En lo que concierne al punto de vista científico, el historiador Michael Brenner indica que "la historia de Israel hasta comienzos del primer milenio anterior a la era cristiana nos es en gran parte desconocida".
[17] La división geográfica que se practicó fue la siguiente: En cuanto a las ciudades levíticas y de refugio se constituyeron como tales las siguientes: Hebrón, Lábala, Jether, Ain, Gabae, Ion, Gazer, Cesión, Bet-Horón, Kibsaim, Damna, Masal, Ceder, Jaser, Manain, entre otras.
Con todo, es posible que no todo el pueblo del reino de Israel haya sido deportado, sino grupos de personas representativas y sus familias, tal vez con algunos o numerosos acompañantes.