Tom Kristensen

También es el piloto más exitoso en las 12 Horas de Sebring, con seis triunfos absolutos: 1999, 2000, 2005, 2006, 2009 y 2012.

En 1992 se mudó a Japón para competir en la Fórmula 3 Japonesa, y al año siguiente obtuvo el título.

Los dos primeros años los realizó en un Nissan Skyline y los dos siguientes en un (Toyota Corona) En 1996 pasó a disputar la Fórmula 3000 Internacional, donde resultó séptimo con dos podios habiéndose ausentado en tres fechas y competido en dos equipos distintos.

En 1997 ganó una carrera, subió al podio en tres ocasiones y quedó sexto en la tabla final.

En 1999 quedó tercero en el certamen, con tres victorias y nueve podios en 20 carreras.

Al año siguiente, siguió corriendo en un Honda Accord pero en el Campeonato Británico de Turismos; terminó 7º con tres victorias.

No llegó a definir ningún título en la última fecha, pero sí rivalizó con Mattias Ekström como mejor piloto de la marca.

En la primera fecha del DTM en 2007, Kristensen se vio involucrado en un choque que lo dejó fuera de actividad por casi dos meses.

En 2011, Audi y Peugeot se volvieron a enfrentar pero en el marco de la Copa Intercontinental Le Mans, con siete fechas en tres continentes.

Lugeo abandonó en Petit le Mans y en Zhuhai, de manera que Peugeot se quedó con ambos títulos nuevamente.

Kristensen disputó junto a McNish las ocho fechas del renombrado Campeonato Mundial de Resistencia 2012 con un Audi R18 híbrido.

En 2013, Kristensen junto con McNish y Loic Duval obtuvieron el título de pilotos del Campeonato Mundial de Resistencia, logrando en ocho fechas tres victorias, tres segundos puestos y un tercero puesto.

En 2001, alcanzó la final en la prueba de selecciones junto a Harri Rovanpera y Troy Bayliss.

El piloto perdió en la primera ronda de ambas pruebas en 2006, formando dupla nuevamente con Ekström.

En 2011, compitió junto a Juho Hänninen por la selección nórdica, con quien perdió la final frente a la selección alemana de Michael Schumacher y Sebastian Vettel, y luego fue derrotado en la final por Sébastien Ogier.

Más tarde, disputó la final individual frente a Romain Grosjean, quien venció al danés.