Audi R10 TDI

El R10 se convirtió en el primer coche con motor diésel en ganar Le Mans (en 2006), aunque logró repetir el título en 2007 y 2008.

Su rival calificado y más icónico fue el Peugeot 908 HDI FAP, no solo porque corrieron juntos sino por compartir una motorización diésel de características similares y además ser los primeros en usar este tipo de motor.

Tiene cuatro válvulas por cilindro, cárter seco y doble árbol de levas en cabeza.

El uso de common-rail constituyó una novedad, ya que los modelos de calle del Grupo Volkswagen al que pertenece Audi solían incorporan motores diésel con alimentación por inyector-bomba (en alemán pumpe düse).

La gestión del motor se ha encomendado a un sistema Bosch Motronic (MS14) de última generación.

Según sus constructores, emite un ruido tan débil y agradablemente acústico que nadie podría identificar, en un primer momento, como el correspondiente a un motor diésel.

El nuevo conjunto chasis/carrocería presenta una ligera carrocería integrada con su chasis monocasco a diferencia de sus rivales.

El nuevo reglamento estipula que la estructura antivuelco debe encontrarse también en el lado correspondiente al inexistente pasajero.

En la parte delantera de la carrocería el escudo inferior ha visto modificada su forma para reducir el apoyo aerodinámico tal como lo impone el nuevo reglamento.

V12 del Audi R10 TDI
Audi R10