En el capítulo, tras ser robados por Snake, los Simpson visitan un seminario sobre el ahorro, donde aprenden diferentes maneras de limitar sus gastos.
Donick Cary y Dan Greaney crearon el guion del episodio, mientras que Jim Reardon se encargó de la dirección.
Fue uno de los últimos en escribirse y el título es una referencia al filme Thirty Seconds Over Tokyo (1944).
Varias estrellas invitadas aparecieron en este capítulo, a destacar George Takei en el papel de Wink, el presentador del The Happy Smile Super Challenge Family Wish Show.
No obstante, ambos lo confunden con otro luchador y el padre lo lanza a un contenedor de ropa mawashi.
Homer regaña a los japoneses por su falta de escrúpulos y les dice que deberían sentirse avergonzados; no obstante, la sádica política del programa no cambia y los siguientes concursantes son unos canadienses que padecen aracnofobia, rodeados de escorpiones.
Según la familia abandona el país nipón, el avión se encuentra inmerso en una pelea entre Godzilla, Mothra, Gamera y Rodan, pero tan pronto como Lisa se pone a dormir, los monstruos permiten que el aparato vaya en dirección a Springfield.
Según Cary, el personal realizó un exhaustiva investigación para representar adecuadamente el lenguaje japonés, tal y como se puede ver, por ejemplo, en las tres categorías del concurso The Happy Smile Super Challenge Family Wish Show, que están escritas en aquel idioma.
[4] En una escena, un personaje con cierto parecido a la mascota del Monopoly puede apreciarse junto al Sr. Burns.
En otro momento del cortometraje, el padre compra una sandía con forma cúbica, que luego resulta ser redondeada y al final se le escapa de sus manos.
[6] En su libro Gilligan Unbound: Pop Culture in the Age of Globalization, el crítico literario estadounidense, Paul Cantor, describió cómo «Treinta minutos sobre Tokio» hace referencias y bromea sobre diversos aspectos de la cultura japonesa y del país americano, así como muestra las diferencias entre ambas.
[7] El concurso está parcialmente basado en el programa japonés Za Gaman, así como en el británico Family Fortunes.
Chispa en Hispanoamérica—, un personaje que había aparecido previamente en el episodio de la octava temporada, «In Marge We Trust».
Mientras tanto, Barney se hace pasar por Homer en el bar de Moe durante su ausencia, y dice la oración: «That boy ain't right» —en español: «Este chico no está bien»—, utilizada frecuentemente por Hank Hill, protagonista de la serie animada, King of the Hill.
Por ejemplo, los autores del libro I Can't Believe It's a Bigger and Better Updated Unofficial Simpsons Guide, Warren Martyn y Adrian Wood, le dieron una opinión favorable, al escribir: «Un magnífico final para la temporada», si bien opinaron que era «cuidadosamente racista, [...pero] completamente inofensivo porque simplemente es muy divertido».
[13] En línea con los anteriores, James Plath de DVD Town comentó que el episodio tiene «algunos momentos divertidos».
[11] Aunque todos los demás episodios de Los Simpson se han doblado y emitido en la televisión japonesa, «Treinta minutos sobre Tokio» nunca lo hizo.