Por esta época Beethoven confesó por primera vez su sordera progresiva a dos amigos, Franz Gerhard Wegeler y Carl Amenda.El editor Hans Georg Nägeli de Zúrich le encargó estas sonatas para incluirlas en su serie titulada Répertoire des Clavecinistes.Beethoven accedió a esta propuesta sin saber que su hermano Carl estaba negociando las mismas sonatas con la editorial Breitkopf & Härtel de Leipzig.Ludwig mantuvo su palabra y envió las piezas a Zúrich, decisión de la que se arrepentiría más tarde.Al principio pensó en publicar un anuncio en el Allgemeine musikalische Zeitung de Leipzig para denunciar los errores.Destaca un gesto en la recapitulación del primer movimiento, donde la forma sonata tradicional requiere que la música aparezca en la tonalidad dominante (en este caso, re mayor).La alternancia entre el modo mayor y menor se convirtió en un recurso habitual más adelante en la carrera de Beethoven.Los punzantes acordes dominan la siguiente sección y dejan que la música descienda a una brumosa región en modo menor.La melodía inicial devuelve el protagonismo al movimiento y pronto se ve desplazada por una sección de suaves repiqueteos similares a campanas.Reconocidos pianistas, como Edwin Fischer y András Schiff, han considerado este movimiento una parodia de la ópera italiana y de los contemporáneos del compositor, que eran mucho más populares que este último a principios del siglo XIX.Allegretto, retoma la tonalidad inicial, el ritmo es alla breve o 2/2 y sigue la forma rondó.Se inicia con un Allegretto que presenta un carácter amable y jovial, similar al del primer movimiento.