En el ensayo, Putin describe sus puntos de vista sobre Ucrania y los ucranianos.
[5] El ensayo niega la existencia de Ucrania como nación independiente.
[8] Según Putin, la actual Ucrania ocupa tierras históricamente rusas,[8] y es un “proyecto antirruso” creado por fuerzas externas desde el siglo XVII.
Afirma que Ucrania es el resultado de decisiones administrativas y políticas tomadas durante la Unión Soviética.
[9] Putin atribuye la crisis actual a complots extranjeros y conspiraciones antirrusas.
[8] Según Putin, las decisiones del gobierno ucraniano están impulsadas por un complot occidental contra Rusia, así como por "seguidores de Bandera".
[34] En España, la afirmación de que Occidente utiliza a Ucrania como una barrera entre Europa y Rusia, como una "anti-Rusia", recordó la doctrina de anti-España empleada por el régimen franquista contra todos sus oponentes, extranjeros y nacionales.
[42] El periodista británico Edward Lucas lo describió como revisionismo histórico.
[43] Otros observadores han señalado que el liderazgo ruso tiene una visión distorsionada de la Ucrania moderna y su historia.
[44][45] Alexandru Muraru, entonces diputado de Rumanía, también respondió al ensayo de Putin, declarando que Besarabia no fue ocupada sino "reincorporada" siguiendo "procesos democráticos y realidades históricas".