Señorío de Híjar

La fundación de este señorío jurisdiccional seguía la tradición de los reyes de Aragón de crear infantados para sus hijos bastardos, dándoles importantes beneficios en rentas señoriales, tierras, villas y castillos.

El primer señor, Pedro Fernández, era hijo de Jaime I con Berenguela Fernández y recibió inicialmente Buñol en el recientemente conquistado reino de Valencia.

Sin embargo, en 1268 el rey le cambió Buñol por Híjar, que había tomado tras pleitos con los Ximénez de Urrea.

Pedro tomó como apellido Fernández de Híjar y como residencia el castillo de la localidad.

Estas terminaron ganando la disputas por lo que Fernando II de Aragón elevó en compensación el señorío de Híjar a ducado en 1483, del que se escindiría Lécera como ducado propio y luego Belchite como condado propio.