La experiencia de esos años vividos se volcaron en diferentes estudios sobre los rosariazos.
[5] [6] Antes, en 1963, a raíz de un trabajo como muralista que le demandaría apenas tres meses, ocurre el hecho que más trascendencia le daría: se incorpora a la Biblioteca Popular Constancio C. Vigil[1].
Vine a hacer un trabajo por 30 y 40 días (los murales en el frente del establecimiento) y me demoré, estuvimos con amigos 90 días colgados de los andamios, frente al edificio, viendo lo que pasaba.
Vi el trabajo, la atención que se tenía a los chicos del barrio.
En aquella época el único combustible que usaban los vecinos era el carbón, no había Gas y el kerosén era muy caro.
[1] Por esos años da comienzo a sus actividades en el campo de los Derechos Humanos.
Por un lado colaboró con innumerables organismos e instituciones a fines, destacándose su participación por más de 10 años en la asociación C.H.I.C.O.S.
[1] Junto al Centro de Estudios Sociales Rafael Barrett y la Biblioteca y Archivo Alberto Ghiraldo lograron homenajear al maestro dándole el nombre de Janusz Korczak a una calle del barrio la Tablada[9].
Nada de lo que sabía como educador, por mi paso por la facultad y la escuela, nada me sirvió; solo me sirve estar con ellos para mantener el diálogo, porque las realidades son otras.
Caminan lentamente, muy próximos a las paredes, suelen ir solos, uno o dos chicos, tres eventualmente… ¿De dónde vienen?
Acá... o acaso, te sentís vivo estando en tu casa solamente?
Su archivo personal, de inigualable valor histórico, está compuesto por temas como: Educación, Arte, Política, Derechos Humanos, Dictadura, Chicos de la Calle, Bibliotecas Populares, Janusz Korczak, proyectos y creaciones editoriales[14].