Rodrigo Arenas Betancourt

[1]​ Es considerado uno de los artistas colombianos más prolíficos y apreciados nacional e internacionalmente.

Durante su estancia en este país, alternaba sus estudios en artes plásticas con trabajos relacionados con su faceta artística.

Al regresar a Colombia definitivamente, a comienzos del año 1967, establece su taller de arte en el municipio de Caldas (Antioquia), donde contaba con colaboradores principiantes y algunos experimentados.

Fue también un hábil escultor que utilizó yeso, madera, basalto, piedra, bronce y terracota, entre otros.

Durante este periodo se dedicó a realizar dibujos en un cuaderno y a escribir sus experiencias en cautiverio, lo que posteriormente fue la base para la creación y publicación de su libro Los pasos del condenado.

[6]​ Entre sus obras más destacadas y que actualmente se exhiben de forma pública se encuentran las siguientes:[1]​[7]​ Inaugurada en 1963 (Monumento a los Fundadores) (Cristo Prometeo) (Prometeo) (Tentación del Hombre Infinito) (Monumento a Las Bananeras) (La Nueva Vida)