Además de su papel como quibla, también es un lugar sagrado para los musulmanes, conocido como la Casa de Dios (bayt Allah), y donde se realiza el tawaf, el ritual por el que se debe dar la vuelta siete veces a la Kaaba durante las peregrinaciones a La Meca denominadas hach (durante el último mes del calendario islámico) y el umrah (en cualquier momento del año).[1] El estatus de la quibla de la Kaaba está basado en los versos 144, 149 y 150 del capítulo al-Báqara del Corán, que declara que "girarás tu rostro hacia la mezquita Sagrada".La tradición islámica declara que estos versos fueron revelados durante el rezo; Mahoma y sus seguidores inmediatamente cambiaron la dirección del rezo de Jerusalén a La Meca en mitad del mismo.Las coordenadas de La Meca aplicables a esta fórmula son latitud φ2 = 21,4225° N y longitud λ2 = 39,8261° E.En algunos casos, el resultado entregado por la fórmula será un ángulo complementario u otro suplementario y no el valor real.Los musulmanes deben conocer la quibla para realizar sus rezos diarios y también para establecer la orientación de las mezquitas.Los métodos matemáticos basados en la astronomía comenzaron a desarrollarse a finales del siglo VIII y comienzos del IX, e incluso no eran algo común en un comienzo, por lo que tuvieron que basarse en métodos no astronómicos.Se basaba en fenómenos naturales como la observación del Sol, la Luna, las estrellas y el viento sin influencia de las matemáticas.Las fuentes históricas revelan algunas quiblas orientadas con estos métodos: la salida del Sol en los equinoccios (al este) en el Magreb, el ocaso de los equinoccios (al oeste) en India, el origen del viento norteño o la Estrella polar en Yemen, la salida de la estrella Suhail (Canopo) en Siria, y la puesta del Sol de medio invierno en Irak.Las orientaciones tradicionales continuaron incluso cuando se desarrollaron métodos más preciosos y aún permanecen en algunas mezquitas medievales actualmente.Fue introducida por autores indios, aunque tras el siglo IX las principales referencias comenzaron a ser astronómicos griegos clásicos como Ptolomeo que fueron traducidos al árabe.[5] Los primeros métodos matemáticos desarrollados a comienzos del siglo IX consistían en usar un mapa plano o geometría bidimensional.Soluciones más exactas, basadas en geometría tridimensional y trigonometría esférica, aparecieron a mediados del siglo IX.Por ejemplo, Habash al-Hasib usó una proyección ortogonal, mientras que Al-Nayrizi aplicó en cuatro pasos el teorema de Menelao.[5] Los astrónomos musulmanes utilizaron estos métodos para compilar tablas donde mostraban la quibla desde un número de ubicaciones, agrupadas por su latitud y su longitud desde La Meca.El problema era que la latitud de un lugar podía determinarse con una cierta precisión, pero no existía ningún método para conocer la longitud.[8]Según la doctrina del jihat al-ka'ba, las diversas orientaciones de la quibla son válidas mientras que se dirijan a una dirección genérica.[5] En 1990, el experto geógrafo Michael E. Bonine llevó a cabo una encuesta en las principales mezquitas de las ciudades más grandes de Marruecos, desde el período idrísida (siglos VIII-X) hasta el período alauí (desde el siglo XVII).Aunque los cálculos modernos mostraban que las quiblas estaban entre los 91° (casi al este) en Marrakech y los 97° en Tánger, únicamente las mezquitas construidas durante el período alauí albergaban una quibla cercana a este rango.Las quiblas de otras mezquitas más antiguas varían considerablemente, desde los 155°-160° hasta 120°-130° (casi el sureste).La dirección actual hacia La Meca se calcula entre los 110° y 113° a lo largo de todo el país.