Puente de Castelvecchio

Para el proyecto de reconstrucción, Piero Gazzola hizo uso de la colaboración del ingeniero Alberto Minghetti para la parte técnica y del arquitecto Libero Cecchini para la parte artística.

La pilona mayor fue enriquecida con quince capiteles corintios y fragmentos de bajorrelieves romanos.

Il percorso lungo il ponte, lungo oltre centoventi metri e largo oltre sei, è difeso da mura merlate a coda di rondine, con camminamenti e feritoie, oltre che dall'imponente mastio verso città e da una torre, parzialmente eliminata dai francesi nell'Ottocento, verso campagna.

El nombre del constructor del puente no se conoce, pero un documento de 1495 (posterior por tanto en más de un siglo a su construcción) parece indicar a un cierto Guglielmo Bevilacqua, protagonista, entre otras cosas, de una leyenda recogida por el cronista Girolamo Dalla Corte en su Historia di Verona: Cangrande II della Scala habría donado a Bevilacqua la espada de san Martín, que había sido conservada hasta entonces en la iglesia homónima, que estaría entre los muros del Castelvecchio.

Algunos estudiosos han planteado la hipótesis, basándose en las similitudes entre este puente y el llamado delle Navi, una autoría común, atribuida tanto a Giovanni da Ferrara como a Giacomo da Gozo.

El puente tras la devastación de la Segunda Guerra Mundial
Las diferentes luces de los arcos del puente son extremadamente evidentes.
Vista elevada sobre el puente
La calzada del puente