Prevención de la violencia de género

Engloba cualquier acto que discrimina, somete y subordina a los afectados negando por completo su libertad, su intimidad, su dignidad e integridad.

En segundo lugar tenemos la violencia psicológica, esta aparece siempre que se da cualquier otro tipo de violencia, no deja huella visible porque se da mediante la palabra (insultos, amenazas, desprecio, humillación, etc.).

Finalmente, la violencia sexual engloba las otras dos anteriores, contiene tanto presiones físicas como psíquicas.

Existen muchos motivos, relacionando los malos tratos en la pareja como un signo de amor o un simple fracaso en la comunicación.

Así pues, la educación que recibirá una persona será clave para evitar la violencia de género.

Si el individuo recibe una educación basada en la desigualdad, el individuo socializa consigo ese modelo educativo, los valores que este comporta, los estereotipos característicos, etc., y más tarde todo esto se irá implantando en otros ámbitos de la vida como el laboral o el familiar.

La violencia estructural se presenta cuando existe poder desigual, oportunidades de vida distintas, desigualdad e injusticia social.

Dados los efectos devastadores que la violencia tiene en las mujeres, los esfuerzos se han concentrado principalmente en las respuestas y servicios para las sobrevivientes.

Lo que puede llegar a establecer relaciones de pareja disfuncionales y poco saludables durante la vida adulta.