Presos políticos de Venezuela

[5]​[6]​ Desde el siglo XVIII las bóvedas del Castillo San Felipe de Puerto Cabello fueron usadas como cárceles.

Muchos de los presos fallecían por las condiciones, algunos se fugaban y otros eran trasladados a cárceles en México, Puerto Rico o España.

[7]​[8]​[9]​ Entre algunos de los prisioneros que fueron fusilados por el bando realista se encontraban los militares Antonio Nicolás Briceño y Pedro María Freites.

Las autoridades españolas al hacerse con el control de la isla establecieron una amnistía que fue revocada meses después y ordenaron la detención del coronel Arismendi.

[17]​Entre 1811 y 1816 la guerra tomó rasgos de un conflicto racial provocando que masas de color se unieran a los realistas asesinando a muchos blancos y generando el temor en la élite mantuana que tomaran el poder e impusieran una pardocracia.

[17]​[19]​Según un relato, al momento de ser fusilado le dio un beso a la bandera, se descubrió el pecho y grito «Viva la Patria».

En 1852 durante el gobierno de José Gregorio Monagas fue puesta en funcionamiento y la prisión alojó a detenidos por motivaciones políticas.

[3]​[24]​El número de presos políticos fue en aumento debido a los conflictos internos como Guerra Federal y la Revolución Azul.

[25]​Entre los detenidos se encontraba Antonio Leocadio Guzmán quien fue acusado de conspirar y condenado a muerte, aunque su pena le fue cambiada por el exilio.

[34]​ En 1900 tras negarse a conceder un préstamo para el gobierno, fueron arrestados varios banqueros entre los que se encontraba Manuel Antonio Matos.

Tras varios días de detención y luego que el gobierno consiguiera los préstamos, fueron puestos en libertad.

[35]​ Inicialmente, Juan Vicente Gómez emprendió su mandato concediendo libertad a presos políticos y restableciendo la libertad de prensa; sin embargo, desestimó disolver el Congreso Nacional y convocar a una asamblea constituyente, petición que entonces gozaba de bastante popularidad.

Entre los arrestados estaban Manuel Flores Cabrera, Enrique Bernardo Núñez, Ramón David León, Juan de Guruceaga, Luis Barrios Cruz y otros.

[55]​ Desde el congreso los diputados José Vicente Rangel, Luis Miquilena y José Herrera Oropeza denunciaron varios casos de personas que fueron detenidas ilegalmente por estar presuntamente involucrados con grupos guerrilleros, siendo presuntamente torturadas, asesinados y sus cuerpos desaparecidos.

[58]​ En 1969 fueron arrestados 26 personas por estar supuestamente involucrados en el asesinato de estudiante Miguel Alfredo Sosa Borregales.

[58]​En 1973 tras la desaparición forzada y muerte del activista Argelio José Reina, varios detenidos del Cuartel San Carlos iniciaron una huelga de hambre para exigir justicia, a la que se le sumaron algunos activistas días después.

[58]​Entre los huelguistas se encontraban Francisco Prada Bazarte, Carlos Betancourt, Gabriel Puerta Aponte, Kleber Ramírez, entre otros.

[58]​La organización no gubernamental Comité en Defensa de los Derechos Humanos (CDDH) denunció ante la fiscalía que en varias cárceles donde estaban detenidos políticos se les prohibía la visita de familiares y se les daban malos tratos.

[58]​El CDDH también denunció que varios miembros de partidos de izquierda involucrados con grupos guerrilleros y otros dirigentes presuntamente relacionados con estos grupos fueron detenidos, entre los que se encontraban Ernesto Virla, David Nieves y Rosa Elena Mata.

[58]​ Uno de los casos denunciados como una detención política fue el del dirigente Jorge Antonio Rodríguez arrestado por la DISIP y que murió tras sometido a torturas.

[58]​ Durante el inicio del gobierno de Jaime Lusinchi fueron dejados en libertad varios detenidos políticos.

Si bien en el pasado esta ley fue usada para arrestar a opositores al gobierno de turno, en general los mayores afectados fueron personas pobres.

En 2003, tres militares vinculados a los soldados sublevados en la Plaza Altamira durante el paro general de 2002 fueron asesinados.

El líder del grupo, el general Enrique Medina Gómez, declaró que varios testigos vieron cómo los militares, junto a dos mujeres que les acompañaban, fueron detenidos y obligados a abordar dos camionetas por hombres vestidos de negro y con las caras cubiertas con pasamontañas.

Su liberación se produjo después de recibir un indulto del presidente estadounidense Joe Biden, en un acuerdo mediado por Catar.

Entre los estadounidenses liberados estaban Joseph Ryan Cristella, Jerrel Kenemore, Jason Saad, Eyvin Hernández y Savoi Wright, quienes llegaron a una base militar en San Antonio, Texas, el 20 de diciembre.

Adicionalmente, fueron liberados 16 venezolanos, incluyendo seis sindicalistas detenidos en 2022 y condenados a 16 años de prisión por "conspiración".

[72]​[71]​ Los seis ciudadanos estadounidenses que habían sido detenidos injustamente en Venezuela regresaron a su país el miércoles pasado, aterrizando en Kelly Field, San Antonio, Texas; entre ellos se encontraban Eyvin Hernández, Savoi Wright, Jerrel Kenemore, Joseph Cristella, Jason Saad y Edgar José Marval Moreno.

Relató las difíciles condiciones de su detención en Venezuela, donde él y otros cuatro estuvieron confinados en una celda pequeña, enfrentando constantes preocupaciones por su seguridad.

[72]​[71]​ Eyvin Hernández compartió su difícil experiencia durante los 630 días de encarcelamiento en Venezuela, sufriendo maltrato psicológico y luchando diariamente.

Preso político de la Rotunda portando perno y grillete en los tobillos para impedir su movilidad
Luisa Cáceres de Arismendi
Fusilamiento de Manuel Piar
José Prudencio Padilla
Manuel Antonio Matos esposado y escoltado en Caracas
Pedro Estrada , jefe de la Dirección de Seguridad Nacional durante la dictadura de Marcos Pérez Jiménez
Prisioneros de la Isla Guasina .