Pirámides de Egipto

Los textos citados indican la función de la pirámide: contener la «esencia» del rey por toda la eternidad.Según los mismos textos, el rey resucita, y asciende al cielo para vivir eternamente entre los dioses, transfigurado en una estrella.En la pirámide romboidal las caras están conformadas con dos pendientes, de inclinación decreciente en dirección a la cumbre.En el denominado primer período intermedio de Egipto algunos gobernantes continuaron la tradición, como Neferkara Neby, Jui, Ity, o Merykara, pero apenas quedan restos.Es en el Imperio Medio (dinastía XII, c. 1760 a. C.) cuando se levantan las últimas grandes pirámides, pero con núcleos de adobe dentro del revestimiento pétreo, actualmente desmoronados.Los faraones del Imperio Nuevo prefirieron construir grandes templos funerarios e hipogeos en la zona de Tebas.Las pirámides muestran, para su época, el gran conocimiento de los técnicos egipcios y la capacidad organizativa necesaria para construir tales monumentos con medios muy simples; pero nada parece indicar que hiciera falta una tecnología superior a la que disponían los egipcios representada por "ingenios" de madera, trineos, y como no conocieron la rueda hasta el Imperio Medio, rodillos de madera y rampas.Zahi Hawass sostiene que fueron obreros muy bien tratados, tras haber encontrado un grupo de tumbas junto a las pirámides.Cada pirámide está identificada con el faraón que ordenó edificarla, la fecha aproximada del reinado y su localización geográfica actual.
Las pirámides de Guiza.
La Mastaba del Faraón, en Saqqara.
«Pirámide escalonada» de Dyeser, en Saqqara.
Pirámides de Jufu (Keops), Jafra (Kefrén) y Menkaura (Micerino), en Guiza.
Interpretación, según Antoine-Yves Goguet (1820), de la construcción de la Gran pirámide descrita por Heródoto.