Pietro Napoli Signorelli

En 1765 salió de Nápoles y con su madre se instaló en Madrid, donde residían algunos familiares; en cuanto a las razones de este traslado, siempre se mostró reticente y unas veces mencionó una desilusión en el amor y otras haber sido "forzado a vivir en países extranjeros, por la falta de un pan que la Patria le negó".[2]​ Volvió a Nápoles con su esposa en 1787, pero no con su hijo Pietro Luigi, que dejó en Madrid en su trabajo de censor general.[2]​ En 1808 se fundó en Nápoles la Sociedad Literaria Pontaniana, que había tomado prestado el nombre de la Academia Pontaniana del siglo XV: Napoli Signorelli fue socio y en 1811 asumió el papel de secretario perpetuo.Dedicó sus últimas fuerzas a la Sociedad Pontaniana y, cuando su salud le impidió moverse, las reuniones de los miembros tuvieron lugar en su casa.A Lampillas le contestó en un "Discurso histórico-crítico" que se publicó como apéndice de la Storia critica en Nápoles, 1783.