Los picos son unos panecillos crujientes típicos en la cocina andaluza.
Existen evidencias de que se inventaron en Jerez de la Frontera a mediados del siglo XX.
Debido a esto la consistencia dura de su interior que se asemeja bastante a la de los biscotes (o Hardtack).
Los ingredientes para su elaboración son la harina de trigo, el agua, la levadura y la sal.
Suele añadirse a la masa una grasa, generalmente de origen vegetal.